El año pasado Google colocó en el mercado los nuevos Google Pixel, los reemplazos oficiales de los terminales Nexus que pasaban entonces a ser de fabricación propia. Aunque realmente el modelo era el seguido por otros como Apple: diseñar en casa y ceder la fabricación a un tercero. Concretamente, ese tercero fue el bueno de HTC.
Pese a los problemas iniciales de distribución, pues aún sigue sin estar disponible en la mayoría del planeta, Google decidió dar continuidad a los Google Pixel y comenzaron a surgir rumores y filtraciones sobre los Pixel 2. La última filtración, en forma de benchmark, nos muestra que la segunda generación de terminales de Google se está convirtiendo poco a poco en un serio rival para el Samsung Galaxy S8 y otras gamas altas de la actualidad.
Un buen cerebro debe garantizar una buena capacidad
Es exactamente lo mismo que nos pasa en la vida, aunque nuestro rendimiento dependa después de la forma en la que usamos nuestra capacidad. Sobre el papel, el Google Pixel 2, y también sus otros dos hermanos sin confirmar, está acumulando cada vez más potencia. Hasta tal punto que se convierte en un rival para el Galaxy S8, el Xiaomi Mi 6 o el Xperia XZ Premium, entre otros.
Filtraciones anteriores nos hablaban de que Google habría optado por el Snapdragon 835 para comandar sus nuevos buques insignia, y el último benchmark que llega del dispositivo lo confirma, hablando también de que el terminal, al menos el más básico de ellos, tendrá 4GB de RAM para gestionar los procesos derivados del procesador.
Como vemos, el cerebro que se va filtrando de este futuro Google Pixel 2 se asemeja cada vez más a los actuales líderes del mercado, presentados o por llegar, y sólo nos restaría conocer algunas características como su almacenamiento interno, su pantalla o su juego de cámaras. Pues al final, la calidad de un smartphone se define por la suma de todos sus componentes, no todo lo marca el procesador.
Sobre la pantalla, llega un rumor sin pruebas palpables por un momento, pero un rumor que suena con fuerza. Uno que habla de que Google se sumaría con el Pixel 2 a la moda de los teléfonos sin marcos y que podríamos presenciar la llegada de una mayor pantalla en el mismo cuerpo de la anterior generación. Exactamente lo que ha hecho Samsung con sus dos Galaxy S8, y lo que ha hecho LG con su LG G6.
Todo lo que vamos leyendo sobre el Google Pixel 2 nos gusta, y nos gusta más conforme avanzan los rumores y las filtraciones. Más potencia, más ratio de pantalla frente al marco y quién sabe si una mejor cámara. Veremos qué tal se defiende en aspectos como la autonomía y, por encima de todo, en el de la distribución. Hay pocas cosas peores que querer un teléfono móvil que no puedes comprar de forma sencilla. O quizá sí.
Vía | TechRadar
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