Occidente no es precisamente el sitio en el que más terminales de Xiaomi se comercializan, pese a que algunos de sus modelos se cuentan entre los más buscados en las distintas plataformas de búsqueda. De hecho, raro es el país en el que Xiaomi cuenta con distribución oficial además de China, su madre patria. Quizá algo bueno para el fabricante en este caso concreto, pues experimenta problemas de suministros.
El Xiaomi Mi 6 está distribuyéndose con cuentagotas y la lista de espera para hacerse con uno va siendo cada vez más larga. Tanto es así que sus salidas al mercado se cuentan por ventas flash, de la poca cantidad de modelos que se venden tal y como entran por la puerta de los almacenes del fabricante chino. La culpa parece ser de los proveedores, o eso afirman desde China.
Que te crezcan los enanos
Desde que se empezó a hablar de la llegada del Snapdragon 835 al mercado se asociaron problemas de suministro al chip. Bien porque Samsung se aseguró de tener para sí las primeras tiradas del chip y no desabastecer a su Samsung Galaxy S8, bien porque los chips de 10 nanómetros están dando más problemas de los esperados y su fabricación es problemática.
El hecho es que se anticipaba que todo el que se subiese al carro del chip estrella de Qualcomm podría tener problemas de suministro, y Xiaomi es uno de los que lo está experimentando. Su reciente buque insignia tuvo en su mano aplicar la técnica LG. El fabricante coreano optó por el Snapdragon 821 para su LG G6 y asegurarse un camino si problemas de stock. Xiaomi no lo hizo y ahora su Mi 6 se fabrica en pequeñas cantidades.
Pero estos retrasos en la fabricación del Xiaomi Mi 6 no sólo afectan a la línea en general, afectada por la baja producción del Snapdragon 835, también parece haber problemas de suministro con las pantallas con cuatro curvas montadas en el dispositivo. La fabricación es lenta y es por ello que en Xiaomi no cuentan con el stock que desearían. De nuevo, la lista de espera crece.
A todo esto se le suma que algunos modelos concretos experimentan sus propios problemas de fabricación, aunque no son del todo desconocidos. Construir un cuerpo cerámico no es ni sencillo ni barato, y mucho menos veloz. Xiaomi ya lo experimentó en sus propias carnes con el modelo superior del Xiaomi Mi 5 del pasado año y se repitió la jugada con el Xiaomi Mi Mix.
Vuelve a ocurrir con el modelo superior de un Xiaomi Mi 6 que sigue despertando deseo allá por donde pasa pero que llega a la tienda de Xiaomi en unas cantidades muy inferiores a las esperadas. Quién sabe, tal vez todo esto no esté sino acrecentando el hype por un modelo que hay que exportar salvo que vivamos en China, y que ahora además cuenta con pocas unidades disponibles. Xiaomi está sufriendo "un OnePlus", aunque no parece que de forma voluntaria.
Vía | Pocket New
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