Samsung duplica el precio de la RAM y es una escalada en el caso. Ya impacta directamente en sus buques insignia de 2026

Sabemos de sobra que el precio de la memoria RAM se está disparando, pero quizá no esperábamos una escalada tan vertical y repentina. Samsung, uno de los mayores fabricantes de memorias del mundo, se ha quedado sin existencias y ha duplicado las tarifas de la noche a la mañana. Aunque pueda parecer un problema logístico, en realidad es el síntoma de una industria que ha decidido priorizar la IA por encima del consumidor. Esto pone en jaque el precio y las especificaciones de los grandes lanzamientos de 2026.

Ultimátum. Según reportan medios taiwaneses y se hacen eco en medios como XDA Developers, Samsung ha notificado a sus clientes que se ha quedado sin stock de memorias. La respuesta ante la escasez era evidente: duplicar el precio de contrato de las memorias DDR5, rozando ya los 20 dólares por unidad.

Fuentes de la industria citadas por el analista Jukan califican la táctica de despiadada: los fabricantes de portátiles y móviles se han visto obligados a aceptar esos costes inasumibles o paralizar sus líneas de producción. Incluso la vieja DDR4 ha sufrido un repunte de precio, por lo que tampoco es una vía de escape barata.

El culpable. No se trata simplemente de la inflación, sino que los fabricantes han dejado de priorizar las memorias para productos de consumo. Esta rotura de stock, por lo tanto, no es un accidente: como ya comentamos en Xataka Móvil estas semanas atrás, gigantes como Samsung y SK Hynix han desviado gran parte de sus recursos de fabricación hacia las memorias HBM, esenciales para los servidores de IA.

Al fabricar para las máquinas y no para los usuarios, se ha originado un cuello de botella artificial en las memorias LPDDR y DDR que usan nuestros dispositivos. De ahí la escasez que amenaza incluso con devolvernos a configuraciones de 4 GB de RAM en la gama de entrada.

El daño colateral. La consecuencia directa de pagar el doble por un componente esencial es matemática pura: el producto final será más caro. Y ese lo pagaremos nosotros. Se estima que el coste de los módulos LPDDR5X para móviles ha pasado de 30 a 70 dólares en un año.

Ante esta subida del 30% en la factura de materiales, fabricantes como Xiaomi ya advirtieron de una subida generalizada en el precio de sus smartphones. Si las marcas no quieren romper la barrera psicológica de los precios actuales, la única salida será la "reduflación": ofrecer menos memoria por el mismo dinero. Algo que frenaría el crecimiento de las cantidades de RAM, establecidas en la gama alta entre los 8 y los 16 GB.

Samsung pide ayuda. La situación es tan crítica que la propia surcoreana pregunta a la competencia para salvar su móvil estrella. La paradoja es total: la división móvil del fabricante es víctima de la de chips (Samsung Semiconductor). Al parecer, según informaciones de la industria, directivos de Samsung planean reunirse de urgencia con Micron durante el CES 2026.

El objetivo no sería innovar o lanzar algo conjunto, sino asegurar que habrá suficientes chips de memoria para fabricar el Galaxy S26 sin que el precio se dispare. Cuando el mayor fabricante del mundo tiene que sentarse con su rival para garantizar el stock, queda claro que la tormenta perfecta de la RAM sigue apretando.

Imagen de portada | Composición con imágenes de Javier Penalva para Xataka y Wikimedia Commons

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