Apple, Google, Amazon, Meta, Microsoft, Samsung y ByteDance han notificado a la Comisión Europea que cumplen con los requisitos para ser consideradas gatekeepers, o guardianes de acceso. Como tales, se enfrentarán a restricciones y reglas especiales en Europa que pueden obligarles a cambiar por completo su negocio o enfrentarse a duras consecuencias.
La Ley de Mercados Digitales, o DMA, es el último azote de Europa contra las Big Tech y establece una serie de medidas de lo que pueden y no pueden hacer aquellas empresas con una posición dominante en el mercado. Apple, Alphabeta, Meta y compañía han confirmado que cumplen los requisitos aunque no será hasta el 6 de septiembre cuando se ratifique su condición. Entonces, tendrán seis meses para transformar sus negocios de forma radical en Europa o se arriesgarán a cuantiosas multas.
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El comisario europeo de Mercado Interior y Servicios Thierry Breton ha anunciado en Twitter que siete tecnológicas han notificado a la Comisión Europea que cumplen los requisitos para que sean consideradas guardianes de acceso: Alphabet, Amazon, ByteDance, Meta, Microsoft y Samsung.
Los requisitos en concreto suponen que el volumen de negocios haya sido de 7.500 millones de euros en la Unión Europea en los últimos tres años o tener una valoración de mercado de, al menos, 75.000 millones de euros y contar con, al menos, 45 millones de usuarios finales mensuales y, como mínimo, 10.000 usuarios profesionales en la Unión Europea.
Las siete Big Tech han notificado que cumplen dichos requisitos, pero ahora es el turno de la Comisión Europa para revisar la documentación aportada y finalizar la lista oficial con la fecha máxima del 6 de septiembre, es decir, en dos meses.
Desde entonces, comenzará la cuenta atrás de seis meses para que las empresas consideradas como gatekeepers hagan impongan profundos cambios en sus sevicios o se enfrenten a multas del 10% de sus ingresos anuales globales (o el 20% en caso de repetir). Como condición de gatekeepers, estas empresas tienen la obligación de:
- Garantizar el derecho de los usuarios a darse de baja de los servicios básicos de plataforma en condiciones similares a las de suscripción
- Para el software más importante (un navegador web, por ejemplo), no imponer este software por defecto en la instalación del sistema operativo.
- Garantizar la interoperabilidad de las funcionalidades básicas de sus servicios de mensajería instantánea.
- Permitir a los desarrolladores de las aplicaciones acceder en igualdad de condiciones a las funcionalidades auxiliares de los teléfonos inteligentes (por ejemplo, el chip NFC).
- Dar a los vendedores acceso a sus datos de rendimiento de comercialización o de publicidad en la plataforma.
- Informar a la Comisión Europea de las adquisiciones y fusiones que lleven a cabo.
La interoperabilidad entre los servicios de mensajería podría transformar por completo la mensajería instantánea, pues las siete Big Tech cuentan con varias de las aplicaciones de mensajería más populares como iMessage, Mensajes de Google, WhatsApp, Instagram, Facebook Messenger o Skype.
No obstante, son las limitaciones las que podrían forzar a Apple a que permita el sideloading en los iPhone, además de permitir la existencia de servicios de pago de terceros más allá del suyo. Son las siguientes:
- Clasificar sus propios productos o servicios de manera más favorable que los de otros participantes en el mercado (autopreferencia).
- Reutilizar los datos personales recabados durante la prestación de un servicio para prestar otro servicio.
- Establecer condiciones injustas a los usuarios profesionales.
- Preinstalar determinados programas de aplicaciones.
- Imponer a los desarrolladores de aplicaciones la utilización de determinados servicios (por ejemplo, sistemas de pago o proveedores de identidad) para que figuren en las tiendas de aplicaciones.
Estas reglas se aplicarán a las compañias denominadas como gatekeepers seis meses después de que así sean designadas. Por tanto, si esta lista se verifica el próximo 6 de septiembre, los cambios deberían llegar antes del 6 de marzo o empezarán a llegar las multas: un 10% de la recaudación anual, un 20% en caso de reincidencia y penalizaciones todavía más graves como la prohibición de adquirir otras empresas durante un tiempo determinado para las infracciones sistemáticas.
Vía | Reuters
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