Samsung Galaxy Note 10 Lite, análisis: la puerta de acceso al S-Pen más económica y equilibrada

Unas pocas semanas antes del lanzamiento de la nueva familia Galaxy S20 Samsung ponía sobre la mesa al Samsung Galaxy S10 Lite y al Note 10 Lite, dos propuestas de gama media-alta que, a pesar de tener el apellido 'Lite', guardan similitudes con las familias de primera línea de Samsung.

Hoy nos ocupa el Samsung Galaxy Note 10 Lite, un terminal que, por primera vez, nos permite acceder al S-Pen de Samsung a un precio relativamente comedido, renunciando a algunas bondades por el camino y sorprendiendo en algunos puntos capitales.

Ficha técnica del Samsung Galaxy Note 10 Lite

Samsung Galaxy Note10 Lite Hybrid-SIM 128 GB 6GB - Aura Black

PVP en The Phone House — 762,89 €

* Algún precio puede haber cambiado desde la última revisión

Una línea de diseño conocida para el primer Note de la familia Lite

Módulo trasero y agujero frontal. Las líneas de diseño de Samsung están claras este 2020

Samsung tiene una clara linea de diseño para 2020: agujero frontal y módulo de cámara trasero. Este Samsung Galaxy Note 10 Lite es así bastante parecido a las familias S20 y a propuestas de gama media como los A51 o A71. Al no ser un miembro de la gama alta de Samsung encontramos un acabado en plástico, resbaladizo y fácil de llenarse de huellas. La sensación en mano es buena aunque, teniendo en cuenta el precio del dispositivo, hubiera sido de agradecer un acabado en cristal. Es un móvil muy grande, aunque los bordes redondeados ayudan a sujetarlo con una mano sin que sea demasiado molesto.

El aprovechamiento frontal es excelente, con unos marcos reducidos y un agujero en pantalla bastante discreto que permite, según GSMarena, que el panel suponga un 86,6% de la superficie frontal del teléfono, nada mal. Resulta curioso que este Note recuerde más a sus hermanos actuales que al propio Note, dejando de lado el diseño anguloso tan característico de su familia.

El agujero en pantalla es bastante discreto, permitiendo aprovechar al máximo el frontal

Respecto a la pantalla, encontramos un panel de 6,7 pulgadas con tecnología SuperAMOLED y resolución FullHD+, un pequeño downgrade frente al QuadHD+ del Note 10. No obstante, el panel es bastante nítido y queda bien calibrado a nivel de color. Está lejos a nivel de densidad y brillo respecto a los modelos de gama alta pero, en términos generales, es un panel más que aceptable.

Un S-Pen, batería de 4.000mAh y jack de auriculares. Por poder, se puede meter todo.

A nivel de audio encontramos uno de los recortes más notables. Un solo altavoz (se pierde el estéreo de la gama alta) bastante sencillo de tapar tanto en juegos como en uso normal. Los niveles de distorsión son demasiado altos, el volumen es bajo (no ha superado los 75db en nuestras pruebas) y, en definitiva, se encuentra por debajo incluso de propuestas bastante más económicas. Al menos encontramos un jack de auriculares, punto a agradecer.

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Un procesador que nos suena y buena autonomía

Al contrario que el S10 Lite, el Note 10 Lite no cuenta con un procesador actual. Por el contrario, apuesta por el Exynos 9810, el procesador del Samsung Galaxy S9. Junto a este procesador llegan memorias de 6 + 128 GB. Si bien el chipset nos dejaba dudas al tener algo de tiempo en el mercado, el rendimiento nos ha sorprendido para bien.

El Note 10 Lite se mueve sin resquicio alguno de lag, es capaz de mover juegos pesados e incluso, tiene un punto de fluidez que no esperábamos. No llega a las cotas de sus hermanos mayores, pero se mueve bien. El calentamiento no tarda en aparecer cuando jugamos a entregas pesadas, aunque es moderado y no llega a preocupar.

Usuarios de perfil medio pueden llegar a los dos días de uso. Del 0 al 50% con uso normal llegamos a las 3h de pantalla.

En cuanto a la autonomía buenas cifras, pero no sobresalientes. Una media de 6 horas de pantalla en un día de uso, cifras que nos permiten despreocuparnos del cargador en todo momento, pero quedan algo lejos de las 8 o 9 horas de pantalla que ofrecen otras propuestas con amperaje similar.

A nivel de software, la gran bondad de la familia Note es poder utilizar las funciones dedicadas para el S-Pen.

A nivel de software encontramos un viejo conocido. OneUI 2.0 basado en Android 10, una capa de personalización muy cargada, algo compleja y con funciones que pueden ser de interés para los usuarios como exploradores de archivos, apps de salud y demás. Punto a favor con Android 10 es que Samsung ha adoptado el sistema de gestos nativo de Google, el cual queda bastante por encima a nivel práctico respecto al sistema nativo de deslizamientos de Samsung.

El punto clave aquí, no obstante, tiene relación con el hardware. El Samsung Galaxy Note 10 Lite tiene un S-Pen, por lo que su software está adaptado para poder usarlo. Al sacar el S-Pen del cuerpo, contamos con las siguientes opciones.

• Crear notas
• Ver todas las notas
• Smart Select
• Escritura en pantalla
• Mensajes animados
• Dibujos AR

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Respecto a la biometría, encontramos tanto reconocimiento facial como lector de huellas. El lector de huellas no es uno de los más rápidos en su rango de precio, aunque no anda mal en precisión. El reconocimiento facial es relativamente rápido, aunque echamos en falta algo más de ángulo (algo normal, teniendo en cuenta que funciona solo mediante cámara). Hemos acabado usando ambos sistemas en conjunción.

Buena nitidez en una cámara que acepta mejoras

Tres sensores de 12 megapíxeles. Sin zooms exagerados, sin Pixel Binning. Spoiler: sale bien.

El gran módulo de cámara de este teléfono esconde tres sensores. El primero de ellos es un angular de 12 megapíxeles con f/1.7 y estabilizador óptico. El segundo un ultra gran angular de 12 megapíxeles y por último, encontramos un telefoto de otro 12 megapíxeles. Ni afirmo ni desmiento mi alegría al ver una apuesta clásica por los 12 megapíxeles sin Pixel Binning ni cifras astronómicas. ¿Por qué? Vamos a echar un vistazo primero a la aplicación de cámara y ahora mismo te lo cuento.

Aquí encontramos la estructura típica de OneUI: una aplicación completa con ajustes que no deberían estar tan escondidos. Por ejemplo, el modo noche o el HDR se encuentran dentro de distintos menús, sin opción de activarlos y desactivarlos de forma rápida desde la pantalla principal. Del mismo modo, viene activo por defecto un optimizado de escenas que recomendamos desactivar.

Fotografía diurna

El Galaxy Note 10 Lite mantiene detalle en los tres sensores, aunque no es consistente a nivel de color y exposición entre los mismos.

Nitidez. Es la mejor palabra para definir las cámaras del Samsung Galaxy Note 10 Lite. Si bien se añade algo de oversharp mediante software, el terminal logra sacar detalle bajo cualquier condición de luz. Apostar por el Pixel Binning, como estamos viendo en un buen número de modelos, puede crear ciertas inconsistencias a nivel de luminosidad. En este caso no encontramos esta tecnología y es el HDR el encargado de gestionar buena parte del resultado final.

Nos ha sorprendido la nitidez del gran angular y el telefoto, algo que nos ha hecho disfrutar de la fotografía al completo en este terminal, independientemente del sensor que estemos utilizando. Incluso cuando ampliamos de forma digital hasta el 10X, el detalle es más que correcto.

Fotografía nocturna

Cuando cae la noche los resultados empeoran, pero seguimos teniendo un buen nivel de detalle incluso con el sensor gran angular. Al contrario que vimos en el S10 Lite, aquí no hay una reducción de ruido agresiva y el sensor logra captar nitidez, ayudado por un pequeño "empujón" artificial que añade detalle en lugar de lavar la imagen.

El modo noche hace que obtengamos unas fotografías más luminosas, aunque los resultados son algo artificiales y no aportan demasiado frente al modo normal.

Respecto al modo noche, no lo hemos usado demasiado ya que no ayuda mucho, más allá de aportar algo de exposición artificial a la fotografía. No hay mejoras en rango dinámico ni nitidez.

Modo retrato (enfoque dinámico)

Samsung sigue afinando la fórmula para su modo retrato. El recorte es bastante bueno, tanto con objetos como con personas. No obstante, el desenfoque sigue siendo algo artificial. Para paliar esto, la marca permite ajustar después de haber tomado la fotografía tanto el bokeh como el tipo del mismo que se aplica, por lo que podemos obtener mejores resultados con una ligera edición.

Selfie

En el apartado del selfie, resultados correctos. El nivel de detalle es aceptable, el trabajo del HDR cumple su función y si apostamos por el retrato también logra recortar bien. Algún que otro problema con el pelo, un fallo del que pocas cámaras logran zafarse.

Samsung Galaxy Note 10 Lite: la opinión de Xataka Móvil

El propósito de Samsung con este Note 10 Lite parece claro: hacer que entrar a usar el S-Pen sea más accesible. Si bien el terminal tiene un precio de partida alto (contextualizando sobre todo la gama en la que se encuentra y el hardware que ofrece), queda bastante lejos de los más de mil euros de partida del Galaxy Note 10.

El equilibrio general del terminal es bueno, nos ha gustado su diseño (pese a echar de menos el cristal), pantalla, rendimiento y autonomía, dejándose en el tintero el apartado del sonido (algo pobre) y algo de mejora a nivel de cámara.

El terminal ha sido cedido para la prueba por parte de Samsung. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.

Samsung Galaxy Note10 Lite Hybrid-SIM 128 GB 6GB - Aura Black

PVP en The Phone House — 762,89 €

* Algún precio puede haber cambiado desde la última revisión