¿Cuál es la mejor compañía de fibra y móvil, y quién tiene la tarifa más barata? Son básicamente las preguntas más habituales ante las que me he encontrado a lo largo de los veinte años que llevo siguiendo la actualidad de las operadoras de telecomunicaciones.
Para responder con más o menos acierto, necesito saber algunos datos básicos, la mayoría de rápida respuesta, porque el interesado suele tener claro si necesita fibra o sólo móvil, o si quiere contratar televisión u otros servicios más premium.
La calidad del servicio puede establecerse, más o menos, en función de la experiencia que el usuario tenga con la cobertura de los diferentes operadores en las zonas donde se mueva habitualmente, pero para ajustar el precio que pagarás mensualmente por los servicios contratados hay un dato que resulta crucial para que puedas ahorrar todo lo posible.
No dejarse llevar por las 'ofertas'
La estrategia de la mayoría de operadores es ofrecer unas tarifas bastante básicas por lo general, y empujar a contratar tarifas un poco más caras que son mucho mejores. Y es cierto, que el menor precio medio del giga se consigue con las tarifas más caras, porque, en proporción, incluyen muchos más datos.
Y la verdad que estas 'ofertas' suelen ser realmente tentadoras, con megas de velocidad de fibra sobradísimos para la gran mayoría, y con montones de gigas, que nos ayudan a despreocuparnos por lo que consumimos, sin que la factura nos penalice por posibles excesos.
Pero ¿nos hemos despreocupado demasiado y estaremos pagando de más? A esa pregunta no hay respuesta, porque pocos saben cuántos datos realmente necesitan.
Las tarifas de los operadores incrementan varias veces al año sus gigas para hacerlas más atractivas, y además, muchos operadores regalan gigas por fidelización, en navidad, en verano, o permiten acumular los gigas que no se gastan. Así que, si tus hábitos con el móvil no han cambiado mucho a lo largo de los años, corres el riesgo de que tu tarifa esté hiper vitaminada, y estés tirando el dinero.
¿Cuántos gigas consumes?
Si buscas ajustar al mínimo lo que pagas mensualmente por el servicio de telefonía, necesitas saber cuántos datos consumes habitualmente. Y consultar la factura en contrato (o consultar el consumo desde la app del operador en prepago) será el método más rápido para saberlo.
Basta con hacer una media aproximada del consumo efectuado durante los meses más estables. Ten en cuenta, que en periodos vacacionales, cuando se puede consumir más, muchos operadores premian a sus clientes con gagas gratis.
Para no quedarnos justos a la hora de elegir tarifa y mantener esa despreocupación por sustos en factura, como punto de partida podemos buscar tarifas que incluyan un 20% más de datos que nuestra media habitual, que creo que es un margen suficiente para garantizar cierta tranquilidad.
Además existen métodos adicionales que garantizan que no habrá sustos en factura, porque en caso de agotar los datos contratados, se reduce la velocidad de navegación, pero no se suele cobrar nada generalmente.
Tampoco hay que temer a contratar una tarifa quizás algo justa para lo que necesitas, porque siempre podrás cambiar a la siguiente tarifa más cara. Tu operador estará encantado de hacerlo. No pondrán obstáculos de permanencia ni te harán muchas preguntas. En cambio, cambiar a una tarifa más barata no suele ser tan cómodo.
Como referencia, os dejo algunos de los precios mínimos existentes en la actualidad con llamadas ilimitadas, partiendo de 12 GB por 5 euros en prepago, 10 GB por 5 euros en contrato, y de 20 GB por 25 euros con fibra incluida.
Imagen portada | Copilot.
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