Son varias las tecnologías que han salido a la carrera en los últimos años. Ha habido guerra de resoluciones, de megapíxeles, por evitar el notch, y las tecnologías de carga parecen un firme candidato a encabezar una de las nuevas competiciones.
Samsung parece ser buen ejemplo de ello, abriéndonos la puerta a las cargas de 100W con sus dos nuevos controladores. Este tipo de carga supone doblar (e incluso triplicar) a algunas de las tecnologías de carga rápida más pudientes del mercado, dibujando un futuro prometedor a la hora de recargar nuestros dispositivos.
Los 100W suponen un gran salto
Como leemos en Sammobile, Samsung ha presentado sus nuevos controladores SE8A y MM101 PD, que admiten hasta 100W de potencia (20V y 5A). Esto supone una potencia 6,66 veces superior respecto a la del propio Samsung Galaxy S10, modelo cuya capacidad de carga se queda en los 15W. Del mismo modo, supone aumentar en cinco veces la potencia respecto a la versión 5G del S10, que en este caso cuenta con un cargador de 25W.
Ambos chips, aparte de centrarse en la propia potencia, están configurados para ser más seguros, incluyendo así detección de humedad y autenticación tipo C, para que ningún dispositivo no soportado pueda cargar con tal potencia. El chip MM101 está en fase de testeo, pero Samsung ha iniciado la producción en masa del SE8A, chip que será compatible con ordenadores, tablets, móviles y monitores.
¿Cuáles son las propuestas más potentes de la actualidad?
Si ponemos el ojo en la carga rápida más rápida de la actualidad, nos topamos con la mCharge de Meizu, una tecnología presentada en 2017, capaz de cargar una batería de 3000mAh en tan solo 20 minutos, gracias a su potencia de 55W (11V x 5A). La nueva tecnología de Samsung supone casi el doble respecto a esta.
Por otro lado, encontramos a fabricantes como OPPO, que ofrece cargas de hasta 50W (10V x 5A) gracias a su VOOC Charge. Muy cerca a esta, encontramos la SuperCharge de Huawei, que queda un paso por debajo con su potencia de 40W (8V x 5A). Aclarar que este tipo de cargas, actualmente, se consiguen por cable, ya que forma inalámbrica se queda en los 20W.
En resumidas cuentas, los nuevos chips de Samsung abren la puerta a tecnologías de carga con prácticamente el doble de potencia respecto a lo que nos encontramos en la actualidad, algo que nos permitirá cargar la totalidad de nuestros dispositivos en unos pocos minutos, independientemente de que su amperaje sea elevado.
