Del Xiaomi Mi A1 al Mi A3: así han evolucionado los reyes de la gama media de Xiaomi

El Xiaomi Mi A3 ya es una realidad. Una de las generaciones más esperadas de Xiaomi, abanderada por la presencia de Android One, que se plantea sobre la mesa de la gama media sin acompañantes, como sí vimos la generación pasada con los Xiaomi Mi A2 y Xiaomi Mi A2 Lite.

Mejorando en puntos capitales como la autonomía, y dando algún que otro paso atrás en otros como la pantalla, repasamos la trayectoria que ha tenido la familia Mi A hasta la fecha, tras tres años de gama media. Desde aquel Xiaomi Mi A1 que rompió el mercado, pasando por las dos siguientes generaciones Mi A2, para acabar con el reciente Mi A3. Esta es la evolución de Xiaomi con sus terminales Android One.

Xiaomi Mi A1, el golpe sobre la mesa

El Xiaomi Mi A1 llegaba con la clara intención (y las cartas necesarias) para conquistar occidente. Se trataba de una versión del Xiaomi Mi 5X, pero con Android One. Este matrimonio supuso un antes y un después en la compañía, ya que MIUI siempre ha sido la seña de identidad de Xiaomi, y no eran pocos los usuarios que soñaban con un terminal de la firma con Android Stock.

Dicho y hecho. Xiaomi se alió con Google para lanzar el Xiaomi Mi A1, con unas especificaciones más que dignas para el momento en el que fue lanzado. En concreto, la apuesta era para con el Snapdragon 625 de Qualcomm, los 4 GB de RAM, 64 GB de memoria interna, y la doble cámara de 12 megapíxeles, que permitía realizar fotografías de retrato y disfrutar del teleobjetivo.

El terminal estaba acabado en aluminio, mantenía unas dimensiones similares a sus rivales (eran tiempos de paneles con 5,5 pulgadas en formato 16:9), y uno de sus pocos pecados era contar con una batería de 3.000mAh. Pese al amperaje, aguantaba el día de uso sin demasiados problemas, gracias a, entre otros factores, la eficiencia energética del Snapdragon 625.

Su panel era IPS, alcanzaba las anteriormente nombradas 5,5 pulgadas, y su resolución era Full HD, superando los 400 píxeles por pulgada. Un panel a la altura de lo que se exigía en 2017. Recordemos que en 2017 la gama media estaba compuesta por terminales como el Motorola Moto G5, BQ Aquaris U Plus, Huawei P8 Lite (2017) o Xiaomi Redmi 4 Pro.

Lo importante del Xiaomi Mi A1 era la filosofía que transmitía: se puede tener prácticamente el mejor hardware y software de la gama media por poco más de 200 euros. ¿Se mantuvo esta filosofía durante las siguientes generaciones?

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Xiaomi Mi A2, la evolución que se esperaba

El Xiaomi Mi A2 llegó haciendo sus deberes en casi todos los aspectos posibles, aunque se dejó algo por el camino, como describiremos más adelante. El diseño se renovaba, pasando a disponer de un formato 18:9 mucho más actual, que permitía subir hasta las 5,99 pulgadas sin que el tamaño aumentase demasiado. De nuevo, la resolución era Full HD, y la tecnología del panel repetía con IPS. El brillo quedaba sobre los 420 nits.

Ficha técnica del Xiaomi Mi A2

Hubo un salto cualitativo en el procesador, que pasaba a ser el 660 de Qualcomm, acompañado por 4 o 6 GB de memoria RAM, según versión. Llamaba la atención que Xiaomi pasó a ofrecer una versión de 32 GB, creando el efecto psicológico de que la versión base seguía estando por debajo de los 250 euros (costaba 249 euros). Sin embargo si intentábamos irnos a "la verdadera versión base", es decir, igualar en memorias al Mi A1 original, nos teníamos que ir hasta los 279 euros.

Sea como fuere, el precio seguía siendo acorde a lo que se ofrecía. Contábamos con doble cámara, bastante mejorada a nivel de sensores y procesado, manteníamos USB Tipo C, Android One… En resumen, mejoras a nivel de procesador, cámara y diseño, dejando de lado un aumento en el amperaje, que seguía siendo de 3.000mAh. Este fue uno de los pocos puntos débiles del Mi A2, aunque podía

Xiaomi Mi A2 Lite

El Xiaomi Mi A2 Lite vino a ser una pequeña evolución del Mi A1 a nivel de batería y diseño, ofreciendo una experiencia principal a la del modelo original (mejorando esos dos puntos clave), a un precio de 229 euros, el mismo del Mi A1 original. Se mantenía el Snapdragon 625, los 3 GB de RAM y 64 GB de memoria interna como base del Mi A2, y la batería crecía como principal baza hasta los 4.000mAh. Como extra respecto al Mi A2, contaba con jack de auriculares.

El panel era de 5,84 pulgadas (0,15 pulgadas menos respecto al Mi A2), pero se seguía conservando la resolución Full HD+. En resumidas cuentas, una alternativa algo más liviana para los que querían apostar por la autonomía en lugar de por la potencia.

Xiaomi Mi A3, la primera vez que un Mi A nos deja 'con hambre'

El Xiaomi Mi A3 tenía en su mano convertirse en la alternativa en mayúsculas para esta gama media 2019 enmarcada en el rango de los 200 y 250 euros. No obstante, nos encontramos ante la primera vez en la que un Xiaomi nos deja 'con hambre', habiendo hecho recortes en puntos capitales que parecían ya resueltos desde hace, al menos, cuatro años.

Sí, nos referimos a su panel de 6,1 pulgadas con resolución HD+, una configuración que queda por debajo de los 300 píxeles por pulgada, la barrera mínima que hace años tomamos como estándar para no apreciar píxeles en la pantalla. A favor del panel, decir que se ha dado el salto a la tecnología AMOLED, y que el brillo ha subido hasta los 530 nits.

No obstante, alternativas de hace cuatro años como el Xiaomi Mi 4i, o terminales tan clásicos como el Xiaomi Redmi Note 3 ya contaban con resolución Full HD, a pesar de ser también bastante económicos.

Del mismo modo, este año no podemos sar el salto a los 6 GB de memoria RAM, ya que todos los modelos cuentan con 4 GB. No obstante, a favor del terminal, decir que se recuperan los 64 GB como memoria base, desterrando los 32 GB esperemos que para siempre. El principal motivo de que no encontremos una configuración de 32 GB es que Xiaomi por fin ha dado el salto a la memoria UFS en su gama Mi A, la cual se encuentra presente mayoritariamente, en módulos que parten de los 64 GB.

Este tipo de memoria es bastante más rápido que el anterior estándar eMMC, por lo que los tiempos de lectura y escritura de este Mi A3 deberían superar, por mucho, a los de sus hermanos menores.

En cuanto al resto de especificaciones, nos encontramos ante un diseño con notch de gota (el Mi A2 no contaba con notch), un renovado Snapdragon 665 construido en un proceso de 11nm (frente a los 14 del 660), y una triple cámara de 48 + 8 + 2 megapíxeles. Nos hubiese gustado ver los mismos sensores del Mi 9T, pero vistas las diferencias en precio, cobra sentido el recorte.

Otro de los grandes saltos viene a manos de la batería, que pasa de los 3.000mAh a los 4.030mAh. Un amperaje que en conjunción con el procesador y la escasa resolución permite llegar a los dos días de uso, según Xiaomi. Del mismo modo, el material de construcción ha pasado del aluminio al cristal, proporcionando un acabado más premium.

Una familia que se ha visto devorada por los 'Xiaomi de pura cepa'

Alternativas como el Xiaomi Redmi Note 7 o el Xiaomi Mi 9T nos muestran un escenario en el que Xiaomi deja claro que no quiere recortes de ningún tipo en sus terminales con MIUI. No obstante, por primera vez en tres años, observamos una alternativa Mi A algo más descafeinada, perdiendo por su camino la ambición de ofrecer las máximas especificaciones al menor precio, la que ha sido históricamente la filosofía de Xiaomi.

No obstante, pese a que este salto generacional ha sido más tranquilo, se han mejorado aspectos clave como la batería. Por fin disponemos de un modelo 'no Lite' con 4.000mAh, amén de disfrutar de las bondades de la triple cámara, que nos permite, entre otros, realizar fotografías en gran angular.

Quedará por ver cómo se acaba ajustando el precio del Mi A3, que a pesar de costar 249 euros en su lanzamiento, bajará previsiblemente en los próximos meses (si todo se repite como con sus hermanos menores, que a día de hoy se encuentran por debajo de los 150 euros).