En qué me fijo a la hora de elegir un router para evitarme problemas de conexión

En mi caso, debido a que mi trabajo depende directamente de la conexión a Internet, siempre he optado por sustituir el router de la operadora por el mío propio. Sí, tengo un router neutro que funciona a las mil maravillas, y ha conseguido maximizar la cobertura WiFi en mi hogar.

Sin embargo, recientemente parece que ha llegado su hora: empezaron las desconexiones y los problemas para acceder a la red, así que es turno de que pase a otra vida. De nuevo, debo abrir la cartera para adquirir uno, pero no antes sin prestar atención a unos aspectos que son cruciales para disfrutar de una buena conexión.

Pagar más no implica tener un mejor router

Lo primero que debemos pensar antes de ir a comprar un nuevo router es que pagar un precio más alto no significa tener un mejor dispositivo. ¿Qué es lo que determina esto? Pues bien, más que nada las especificaciones del router, así como sus tecnologías. Te lo voy contando con más detalle.

En los años que llevo gestionando la red de mi hogar me he encontrado con routers extremadamente baratos que rindieron bastante bien y otros bastante costosos que me defraudaron. Por ello te recomiendo no obsesionarte con el precio: no implica, por lo general, mejores características. Hablando para un uso común en casa, claro está.

De hecho, la pregunta que siempre me hago es: ¿Es un buen router para mí? Y eso sólo lo podemos responder con nuestras propias necesidades, empezando por un aspecto esencial para mí.

Necesito unos cuantos puertos Ethernet

En casa, cuantos más puertos Ethernet tenga disponible, mejor. Conecto por cable mi Smart TV, un par de consolas y un PC de escritorio (mi principal herramienta de trabajo). Por tanto, necesito siempre un router bien surtido de puertos.

Como mínimo cuatro, como el router que tengo ahora, aunque en otras ocasiones he llegado a aprovechar hasta seis de estos conectores. ¿Por qué priorizo el Ethernet? Es mucho más sencillo sacarle provecho al ancho de banda que contraté y que llega por fibra óptica hasta mi hogar.

Domar 1 'giga' simétrico a través del WiFi es posible con las nuevas versiones de la conectividad inalámbrica, pero no hay nada como el cable. Me olvido de cobertura, de problemas de conexión y de otros obstáculos, al menos en los equipos importantes.

Como mínimo con WiFi 6, incluso WiFi 6E

Hablaba de que es posible exprimir las altas velocidades que nos proporciona la fibra óptica de manera inalámbrica. Y sí, aunque es necesario dejar atrás el WiFi 5 y apostar por estándares como el WiFi 6 o WiFi 6E. Tengo claro que mi próximo router contará también con WiFi 7.

Por el momento me basta con la sexta versión, para así conectar a la red mi móvil, una tablet, y accesorios como el Chromecast de Google. Aunque mi recomendación es clara, todo dependerá de los dispositivos que tengas por casa: no todos son compatibles con WiFi 6 en la actualidad.

Quiero un router que sea verdaderamente mío

Además de la tecnología de WiFi, un aspecto que miro previamente y es casi obligación para mí es la posibilidad de hacer el router completamente mío. Sin excepciones. ¿A qué me refiero con esta afirmación? A que pueda modificarlo libremente.

Como entusiasta de la tecnología, he ido aprendiendo ciertas nociones, y en este sentido siempre busco routers que cuenten con un buen soporte de la comunidad. Con los firmwares de OpenWRT (un sistema operativo para routers) me aseguro poder controlar al milímetro su funcionamiento, además de tener herramientas para cualquier imprevisto que surja.

No sólo para ganar en libertad instalo un firmware alternativo, sino que también me vale para solucionar problemas que el propio fabricante tarda más en hacer. De verdad, recomiendo optar por modelos compatibles con este sistema, es diferencial.

En los pequeños detalles está la diferencia de una buena conexión

Volviendo al territorio de las especificaciones, hay tres concretas que aportan una mejor interconexión entre mis dispositivos. En primer lugar tenemos el Beanforming, útil para repartir la señal de una mejor manera y evitar problemas con el WiFi. No tengo una casa especialmente grande, pero en algunas habitaciones suele llegar algo debilitada la señal.

Esta tecnología hace que el router analice las señales provenientes de mis aparatos, y así encuentra el mejor camino hasta ellos. Apunta también el nombre de «Direction Sensing», capaz de mover la transmisión a una dirección determinada (la señal WiFi es por defecto omnidireccional).

Las otras dos inciden en pequeños añadidos que si bien parecen ser imperceptibles, ayudan a que todo funcione mejor. Por un lado, MU-MIMO, y por otro OFDMA, mejoran la transmisión de grandes volúmenes de datos y consiguen una mayor estabilidad con los volúmenes más pequeños, respectivamente.

Casi se me olvidaba un pequeño factor: el número de antenas. Para evitar dolores de cabeza con la cobertura de la red WiFi, buscaría un mínimo de cuatro, aunque hay opciones económicas en el mercado con algunas más que maximizarán la señal.

No suelo tener problemas por el tamaño de mi casa, como decía anteriormente, pero quizá algún día de el salto al WiFi Mesh, una alternativa para cubrir grandes superficies.

Debo mencionar que todas estas especificaciones con nombres difíciles de pronunciar suelen aparecer en el empaquetado original, así como en la web oficial del fabricante de cada modelo. Recomiendo revisarlo antes de lanzarte.

Mi última elección fue...

Con todo esto en mente, acudí a mi tienda online de confianza y empecé a revisar cada uno de los modelos más vendidos, siempre que fueran ciertamente económicos. No quería desembolsar de más, ni comprarme lo más básico, buscaba buen rendimiento a precio.

Finalmente, lo más gracioso de todo es que elegí por un aspecto que no he nombrado hasta ahora: el diseño. Y en eso me conquistó el Huawei AX3. Hasta ahora sigo contento con él, cumpliendo con sus especificaciones y también en la práctica. No he tenido ni un sólo problema de conexión.

Eso sí, es únicamente una recomendación, existiendo en el mercado alternativas igual de buenas y a precios similares. En definitiva, estos son los aspectos en los que me fijo detenidamente antes de adquirir un nuevo router: no puede dejarme tirado en el momento más inoportuno.

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