Por suerte, el que aquí escribe no tiene problemas para conectarse a internet a alta velocidad desde hace años. En mi localidad contamos con el cable de Euskaltel desde años inmemorables y la fibra de Movistar ya lleva instalada en nuestras calles unos tres años. Para rematar, desde 2016 contamos con la fibra de Vodafone y Orange (y Jazztel), por lo que solo falta MásMóvil por llegar, que no ofrece sus servicios con la fibra de Orange en Vizcaya.
Pero no es ese el caso de todos los municipios de España, ni mucho menos. No nos tenemos que ir a las zonas más rurales ni lejos de grandes ciudades para encontrarnos con poblaciones que solo pueden contar con una red de fibra, cuando no tienen que recurrir al viejo ADSL u otras alternativas. Hablando de los primeros, municipios que solo tienen la red de fibra de Movistar, parece que su monopolio se acabó, dada la actualización de la regulación para su acceso mayorista. Pero nos preguntamos, ¿será suficiente para que los habitantes de dichas poblaciones puedan elegir entre distintos operadores?
Hasta que la CNMC no aprobó la nueva regulación sobre acceso mayorista a la fibra de Movistar muy pocos operadores eran los que optaban por usarla para ofrecer sus servicios. Antes de su aprobación la competencia del operador podía usar en toda España la fibra del ex-monopolio, pero con una limitación de 30 Mbps de bajada que no permitía competir con las conexiones de mayor velocidad de Movistar.
Los costes de usar la fibra de Movistar
La regulación actual no permite acceder a la fibra de Movistar en toda España, quedan excluidas las poblaciones que tengan al menos tres redes de fibra o cable en su subsuelo, lo que supone un total de 66 municipios. Pero en el resto del país, donde vive el 65% de los españoles, el operador sí tiene que permitir a sus rivales usar su fibra, pudiendo ofrecer hasta la máxima velocidad que ofrezca Movistar, actualmente 300 Mbps.
Para poder ofrecer sus servicios mediante la fibra de Movistar, los alternativos lo primero que necesitan es instalar su equipamiento en una única cabecera por provincia. A partir de ahí toda la red usada es la de Movistar, aunque el equipamiento del interior del hogar del cliente ya corre a cuenta del operador interesado, ejecutando un técnico de Movistar el tendido hasta el hogar.
Obviamente todo ello no sale gratis. El primer pago a asumir por el operador que use la fibra de Movistar es el de la instalación, que va desde los 22 euros de un alta que ya la tiene la fibra en su casa hasta los 68 euros de un cliente que requiere de la instalación completa. Es por ello que normalmente los operadores que ofrecen fibra indirecta exigen una permanencia, para amortizar un coste que no trasladan directamente al usuario.
Una vez el servicio en marcha, el Vodafone, Orange o cualquier operador que hace uso de la fibra de Movistar ha de pagarle a su rival una cuota fija mensual. Dicha cuota está fijada en la actualidad en 19,93 euros al mes, pero no es la única a pagar. Cada operador tiene que contratar además un caudal, una capacidad de tráfico, en función de lo que crea que va a necesitar, coste que es el que acaba de ser rebajado.
De hecho, el pago por el caudal que tienen que realizar los operadores alternativos se divide en tres categorías, según los servicios que quieran ofrecer. La más económica, Best Effort, está orientada a ofrecer servicios a clientes particulares, siendo la Oro la destinada a ofrecer una conexión de calidad asegurada a empresas, mientras que por último la Real Time se destinada a clientes con necesidades especiales, como servicios de telefonía IP.
¿Permiten los costes ofrecen tarifas competitivas?
Hacer un cálculo exacto de cuánto le supone a un operador dar servicio a un cliente mediante la fibra de Movistar es imposible, dado la variable del consumo o necesidad de velocidad de cada uno de los usuarios que condiciona el coste por el caudal contratado por el operador. Pero sí sabemos que la factura mensual por cliente es de al menos 19,93 euros al mes, por lo que nunca veremos una oferta de 20 euros o similar.
Los costes mayoristas, establecidos por la CNMC, están orientados por un lado a cubrir los costes de Movistar por ofrecer el servicio mayorista y por otro a hacer posible que sus ofertas sean replicables y competitivas. Los 50 Mbps simétricos de Movistar tienen un precio de 60,40 euros (alquiler de línea incluido) por los 65,40 euros de la conexión con 300 Mbps simétricos. Precios que parecen fácilmente rebajables por sus rivales, incluso sustancialmente, con los actuales costes mayoristas.
De hecho, sin la última rebaja de los costes de la capacidad que hemos visto esta semana, ya hay ofertas que rebajan el precio de la fibra de Movistar haciendo uso de ella. Por ejemplo, Jazztel ofrece los 50 Mbps simétricos por 45,13 euros mensuales, 15 euros menos que Movistar y con una línea móvil incluida. Sus 300 Mbps simétricos ascienden a 57 euros al mes, que siguen siendo ocho euros menos que el precio de Movistar.
La competencia en fibra está al caer
Hasta ahora las ofertas de fibra indirecta han sido limitadas geográficamente y en ocasiones suponían sobrecostes sobre el precio de contratar fibra directa, pero lo cierto es que el monopolio de Movistar en muchos municipios en los que su fibra es la única existente (porque ellos se han dejado el dinero en el despliegue, todo sea dicho) está cerca de ver su fin.
Es cuestión de tiempo, semanas, que los rivales de Movistar, desde los más grandes hasta los operadores locales, se aprovechen de la última rebaja en los precios mayoristas para lanzarse a instalar su equipamiento en la cabecera de todas las provincias para ofrecer sus servicios mediante la fibra de Movistar, incluso sin sobrecostes sobre su oferta haciendo uso de sus redes propias.
Fotos | Groman123 | titanium22
En Xataka Móvil | Comparativa tarifas de fibra con Vodafone, Orange, Jazztel y Oceans a través de acceso indirecto Movistar
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