El Samsung Galaxy S24 Ultra ha llegado cargado de novedades, pero muchas de esas novedades están centradas en el software o bajo el capó. Su diseño permanece muy similar a la generación anterior, el S23 Ultra, con dos grandes excepciones: su marco se ha renovado y su pantalla ahora es completamente plana.
El marco más plano y compuesto de titanio está muy bien, pero sin lugar a dudas el cambio más importante y llamativo en este nuevo terminal se encuentra en su parte frontal: tras casi una década con bordes curvos en la pantalla, Samsung ha decidido cargarse, de una vez por todas, las curvas en su móvil más premium, poniendo fin a una tendencia que, para muchos usuarios y fanáticos de los móviles, debía morir de una vez por todas.
Lo que comenzó como un experimento se convirtió en un estándar
La división de móviles de Samsung lleva más de una década coqueteando con la idea de un dispositivo con una pantalla diferencial. Me atrevería a decir que incluso el primer Galaxy Note fue parte de esta idea, un móvil que llegó en el año 2011 con unas gigantescas 5,3 pulgadas, o al menos así se sentían en aquel entonces, época en la que el estándar de las pantallas en los móviles eran las 4 o 4,5 pulgadas (mi yo de ese año se sorprendería si supiera que actualmente llevo en el bolsillo un móvil de 6,8”).
Sin embargo, el primer experimento realmente radical llegó en 2013, con el Samsung Galaxy Round, un móvil que tenía una pantalla OLED completamente curva hacia su interior, como si hubiese tomado la forma redondeada de la pierna al llevarlo en un bolsillo, con la idea, según la compañía, de ser más ergonómico al sujetarlo.
Samsung nos adelantaba con el Galaxy Round que su intención era lanzar móviles cuya pantalla fuera distintiva, que contaran con un factor diferencial que, al menos al principio, fuera único en el mercado.
Samsung Galaxy Round.
Después del Galaxy Round llegó el Galaxy Note Edge en 2014, una versión alternativa del Galaxy Note 4 que contaba con uno de sus bordes completamente curvo, y que Samsung decidió que ese borde serviría para mostrar información y tener acceso rápido a distintas aplicaciones, como una especie de dock para las apps, pero lateral, algo que iba muy bien si eres diestro pero se complicaba un poco si usabas el móvil con la mano izquierda. Un detalle nada más, parte de un experimento tan particular.
Galaxy Note Edge: su borde extremadamente curvo mostraba accesos directos a aplicaciones y más información.
Sin embargo, en 2015 llegó el Galaxy S6 Edge+ y marcó un antes y después para la compañía, al contar con una doble curva en su pantalla. Sus bordes no eran tan pronunciados como en el Galaxy Note Edge pero sí lo suficiente como para que se sintieran considerablemente en la mano.
Y este móvil marcó una tendencia, lo que comenzó como un experimento, a partir de ahora, se convertiría en el estándar, uno que veríamos en todos los móviles más premium de Samsung durante los siguientes años… hasta ahora.
Samsung Galaxy S6 Edge+
¿Es realmente mejor una pantalla plana?
Las pantallas curvas tienen una cosa que creo que es lo que las ha hecho sobrevivir, en el caso de los móviles Samsung, durante tanto tiempo: son realmente bonitas. A nivel estético, lucen muy bien porque pueden hacer sentir que el móvil tiene bordes infinitos que se fusionan con la mano del usuario, casi no se ven los marcos, y se pueden usar esos bordes para funciones menores como, por ejemplo, iluminarlos para las notificaciones.
Pero más allá de la estética, hay otros factores muy importantes a considerar (además de que la estética es subjetiva, hay quienes sencillamente preferirán el look de una pantalla plana).
Las desventajas de las pantallas con bordes curvos pueden incluir varios factores: el más importante es que suelen ser más frágiles por diseño ante las caídas, por lo que si dejas caer tu móvil desde una altura considerable y golpea el suelo directamente en uno de sus bordes, es probable que ocurra lo peor. Además, las pantallas curvas también suelen ser más costosas de reparar.
Más frágiles, más costosas, pueden distorsionar la imagen en los bordes… Mantener las pantallas curvas en los móviles de gama más alta parecía ser una decisión meramente estética, una que, repito, me parecía distintiva y que le ofrecía un buen look a los móviles, pero al fin y al cabo como usuario me importa más una pantalla más resistente y precisa al mostrar imágenes de un lado a otro, sobre todo si va acompañada de unos marcos mínimos, como es el caso del Galaxy S24 Ultra.
El S24 Ultra rompe el molde: bienvenidas las pantallas planas a los móviles más premium de Samsung
Samsung habría puesto un punto final a la tendencia de las pantallas curvas en su nueva generación de smartphones. Esta vez, la compañía ha incluido una pantalla AMOLED con una diagonal de 6,8 pulgadas con resolución QHD+ y un brillo máximo de hasta 2.600 nits, que debería permitir ver el contenido en pantalla incluso bajo la luz directa del verano más intenso en la playa.
La pantalla plana está protegida por el cristal Gorilla Glass Armor, la última generación de cristales protectores de Corning que la compañía promete que aumenta considerablemente la resistencia a los arañazos. Y además, la pantalla cuenta con un material antirreflejo que funciona increíblemente bien.
Por supuesto, tendremos que esperar al Galaxy S25 Ultra para saber si realmente han muerto las pantallas curvas en los móviles más premium de Samsung, pero todo parece indicar que fue así.
Esta es una tendencia que con el paso de los años sigiuieron otros fabricantes (me viene a la mente aquel Motorola Edge de 2020 con sus bordes curvos muy pronunciados y el reciente OnePlus 12, por mencionar dos ejemplos). Ahora, Samsung parece querer dejarla atrás, y esto es una buena noticia para la resistencia y durabilidad del Galaxy S24 Ultra, un móvil que en materia de software está diseñado para recibir 7 años de actualizaciones de Android, es lógico que esa durabilidad también venga acompañada de un exterior aún más resistente que generaciones pasadas.
Personalmente, recibo con los brazos abiertos estas pantallas planas en la gama más premium de los Samsung Galaxy, pero te pregunto, estimado lector: ¿prefieres pantallas completamente planas o con bordes curvos?
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