Noelia Hontoria
EditoraNo sé cómo lo hago, pero los días en los que juega mi equipo suelo estar fuera de casa. Compromisos personales, viajes de trabajo, escapadas de turismo… Al final me cansé de perderme todos los encuentros y empecé a usar el móvil para ver los partidos más importantes. Lo bueno es que ahora tenemos dispositivos que lo hacen cada vez es más fácil y agradable y la experiencia se va acercando a la del televisor (salvando las distancias obvias).
Eso sí, no vale hacerlo de cualquier manera. Para ver (bien) el fútbol desde el móvil fuera de casa tienes que tener en cuenta tres factores: pantalla, batería y conectividad.
El primer paso es hacer estos ajustes en la pantalla
Al contrario de lo que ocurre con los televisores, que suelen contar con un ‘Modo Deporte’, en los móviles esta opción no existe, por lo que nos toca configurarla a mano.
El primer paso es ajustar la resolución y la tasa de refresco a las más altas que te ofrezca tu móvil. Lo encontrarás en el menú ‘Ajustes’ > ‘Pantalla y brillo’ > ‘Resolución de pantalla’ / ‘Frecuencia de actualización de pantalla’ > ‘Alta’.
En mi caso, suelo tener ambas opciones en modo Inteligente o Dinámico para ahorrar batería, pero cuando voy a ver un partido y quiero disfrutarlo como se merece lo mejor es seleccionar manualmente la más alta disponible. Una tasa de refresco a 120 Hz te va a permitir ver los movimientos del balón mucho más fluidos y rápidos, imprescindible para este tipo de contenidos.
A continuación, es interesante hacer algún ajuste en el color. Selecciona el más vivo que tenga tu teléfono. En el menú ‘Ajustes’ > ‘Pantalla y brillo’ > ‘Temperatura y modo de color’ escoge el tono ‘Vívido’ (o similar).
Si tienes la opción de ‘Optimización de vídeo’ puedes activar también ‘Pantalla superdinámica’ y ‘Pantalla vívida’, aunque en este caso no todas las aplicaciones son compatibles.
No te olvides tampoco de ajustar el brillo en función del lugar en el que te encuentres. Si estás en exteriores, cuanto más brillo mejor, pero si estás en interiores o en lugares mal iluminados es preferible bajar un poco el nivel para no te resulte incómodo.
Por último, recuerda que las plataformas donde se emiten los partidos suelen tener sus propios ajustes. Siempre que esté disponible, escoge el modo 4K y HDR.
Hay que tener especial cuidado con la batería
Todos los ajustes explicados anteriormente te van a ayudar a sacar la mejor calidad a la pantalla de tu móvil, pero tiene un problema: también se pueden zampar la batería. Activar el modo ahorro de batería no es la mejor solución, ya que precisamente puede “capar” alguno de los ajustes mencionados.
Sin duda la batería puede convertirse en un problema teniendo en cuenta que son contenidos con altos requisitos y de una duración basante larga. Aquí tenemos que tomar una decisión: buscar el equilibrio entre calidad de pantalla y duración de la batería o tratar de reducir el consumo por otro lado.
Si no quieres renunciar al 4K, los 120 Hz de refresco o el HDR, hay pequeños gestos que te pueden ayudar a estirar la autonomía.
Priorizar conexiones por Wi-Fi en lugar de datos móviles es una buena idea, además de “matar” la actividad en segundo plano de las apps que tengas abiertas.
Por otro lado, usar auriculares en lugar de los altavoces puede mejorar la eficiencia del terminal y, cómo no, no nos podemos olvidar de la temperatura del dispositivo, un punto bastante clave a la hora de consumir energía. Cuanto más caliente esté el móvil, más batería consumirá, así que esfuérzate en mantenerlo fresquito.
Entonces, ¿cuál es la mejor opción? Mi consejo es que depende mucho del terminal que tengas. Si tienes un móvil con una autonomía muy generosa o puedes mantenerlo cargando, es un gustazo disfrutar de la calidad que a día de hoy pueden alcanzar las mejores pantallas.
Pero si la batería ya te dura un suspiro no tiene sentido que la sigas machacando y te arriesgues a que el móvil se apague antes del segundo tiempo. En ese caso, los ajustes para ahorrar batería viendo el fútbol tienen mucha más lógica.
Una buena conexión para no perderte el gol
Pero lo más importante de todo es que el partido no se corte en los momentos más interesantes. Y para ello necesitamos una buena conexión. En la medida de lo posible, es preferible conectarse a un Wi-Fi en lugar de tirar de datos móviles, sobre todo si estás en una zona de cobertura cuestionable o muy masificada.
Si tienes que usar sí o sí tus datos móviles, recuerda desactivar el ahorro de datos (‘Ajustes’ > ‘Red móvil’ > ‘Uso de datos’ > ‘Ahorro de datos’. Cerrar las apps que puedan estar consumiendo datos en segundo plano también es una buena opción, además de activar el ‘Modo No Molestar’ para que no te entren llamadas y notificaciones que puedan estar distrayéndote continuamente.
Preparar el móvil para ver bien un partido tiene su miga, pero al final es algo que puede depender bastante de tus gustos y necesidades. Ve jugando con los diferentes ajustes que ofrezca tu móvil y encuentra tu configuración perfecta para no seguir a tu equipo favorito desde la pantalla del teléfono, estés donde estés.
Imagen de portada | Generada con Gemini
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