La Comisión Europea quiere seguir avanzando en los objetivos de la Agenda Digital. Para ello, esta semana ha propuesto una normativa que pretende reducir en hasta un 30% el coste del despliegue de las redes de alta velocidad.
Según explican, la obra civil (por ejemplo la excavación de zanjas para tender fibra) representa hasta un 80% del coste total del despliegue de las redes, y no siempre se realiza de forma eficiente ni coordinada. Por ello se plantea lograr los siguientes cuatro objetivos:
- Garantizar que los edificios de nueva construcción o renovados están adaptados a la banda ancha de alta velocidad.
- Abrir el acceso a los conductos, cámaras subterráneas, bocas de acceso, distribuidores, postes, mástiles, instalaciones de antenas, torres y otras construcciones de apoyo.
- Poner fin a la descoordinación de las obras civiles, permitiendo que cualquier operador de redes negocie acuerdos con otros suministradores de infraestructuras.
- Simplificar el proceso de concesión de permisos, que deberán concederse o denegarse por defecto en un plazo de seis meses.
La propuesta quiere lograr un ahorro para las operadoras europeas de entre 40.000 y 60.000 millones de euros, que podría ser usado para ampliar el área de cobertura de las redes de fibra óptica de nueva generación.
Vía | Europa
