Llevar una gran pantalla en el coche es una idea muy atractiva. Podemos poner tanto pantallas específicamente diseñadas para el coche como nuestro móvil o tablet y es una buena idea porque se trata de un elemento funcional. El objetivo es sustituir a la radio con nuestro servicio favorito de streaming, pero también colocar ahí Google Maps, Waze o, directamente, crear un Android Auto casero con una vieja tablet.
Sin embargo, cada vez son más populares las pantallas que ya vienen con Android Auto y están pensadas para colocar en el coche casi de una manera Plug&Play y que sustituyen al sistema de infoentretenimiento del vehículo. La gran pregunta es… ¿son legales estas pantallas con Android Auto y Apple CarPlay o nos exponemos a una multa? Vamos a ver qué dice la DGT sobre esto.
Lo primero es lo primero: si estás buscando instalar un soporte para el móvil o la tablet, debes saber que no hay motivo para que te sancionen siempre que la colocación no interfiera con la seguridad. Si el soporte está colocado en una zona en la que no impida la correcta visión de la vía, no hay problema.
Con las pantallas de infoentretenimiento, ocurre exactamente lo mismo. Si no las conocías, este tipo de pantallas son sistemas que ya llevan lo necesario para que proyectemos Android Auto o CarPlay desde el móvil y, por lo general, son como una tablet pequeña en formato 16:9 o hasta más panorámicas.
De esta forma, si nuestro coche no tiene Android Auto o CarPlay y queremos disponer de este sistema, en lugar de utilizar nuestro móvil como pantalla (con la batería que ello consume), se puede optar por estos sistemas dedicados que, además, podemos colocar de forma permanente en el vehículo.
Dicho esto, la norma para la colocación de estas pantallas es la misma que con un GPS dedicado o con nuestro teléfono. Esto es lo que dicta la DGT:
- La pantalla no debe impedir la correcta visión de la vía. Esto es de cajón y es algo que ya hemos comentado: cualquier dispositivo colocado en el coche debe permitir la correcta libertad de movimientos del conductor y no limitar la visión. Si el sistema es muy grande o si está mal colocado, nos pueden multar con hasta 100 euros.
- No se puede usar la pantalla mientras conducimos. Esto aplica a las pantallas con Android Auto y CarPlay, pero también al propio GPS o al móvil. Podemos usar estas pantallas siempre que el vehículo esté detenido. Usarlo mientras conducimos es un riesgo y, si nos pillan con las manos en la masa, la sanción asciende hasta los 200 euros y tres puntos menos en el carné.
- No podemos llevarlo en las manos. Esto tiene que ver con el punto anterior y, de la misma manera que no podemos usar el móvil mientras conducimos, no podemos llevar esta pantalla (encendida o apagada, da igual) en las manos cuando el vehículo está en marcha. La multa puede ser de 200 euros y seis puntos menos.
Una pantalla de este tipo con Android Auto y CarPlay. Foto de Eva Rodríguez
Como ves, al final, estas pantallas son completamente legales y un muy buen complemento para nuestro vehículo, especialmente si no tiene un buen sistema de infoentretenimiento o si usas mucho el navegador del móvil. Lo único que debemos tener es algo tan importante como el sentido común para que estas pantallas tan útiles no se conviertan en un peligro.
Y sí, aunque hay sistemas enormes, para llevar el servicio de música por streaming y una aplicación de navegación, tampoco hay que irse a tamaños muy locos, por lo que cuanta más contenida la diagonal de pantalla, mejor.
Imagen de portada | Alejandro Alcolea
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