Hay más procesos en marcha cuando el móvil está en reposo de lo que pensamos. Estos son los motivos por los que sigue gastando batería

  • Hay noches en las que tu móvil pierde un 2 % de batería y otras en las que cae un 10 % sin tocarlo.

  • Casi siempre la diferencia está en si ese “reposo” fue real o solo aparente

movil con la pantalla apagada
Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
manuel-naranjo

Manuel Naranjo

Editor

Tu móvil puede estar quieto encima de la mesa, con la pantalla apagada y sin que lo toques en horas, pero eso no significa que esté “parado”. En realidad, sigue haciendo trabajo silencioso para que, cuando lo cojas, todo parezca instantáneo: notificaciones al día, fotos a salvo, apps listas y el sistema funcionando fino.

Reposo no es apagado

El “reposo” del móvil es más bien un modo de bajo consumo. La pantalla se apaga, el procesador baja revoluciones y muchas tareas se posponen, pero el sistema no se desconecta. Hay un reposo real, cuando el Samsung puede dormir de verdad, y un reposo aparente, cuando parece dormido pero se despierta cada poco por algo.

Ese “algo” casi siempre es una combinación de red, apps y sensores. Si el móvil detecta actividad de datos, un cambio de ubicación, una app pidiendo actualizarse o una sincronización pendiente, entra en pequeños ciclos de activación. Son segundos, pero repetidos muchas veces acaban sumando.

Aunque no lo parezca, el teléfono suele estar ocupado con tareas típicas como sincronizar correo y mensajería, mantener el “push” de notificaciones, hacer copias de seguridad, subir fotos, indexar archivos para búsquedas, optimizar el sistema y preparar actualizaciones.

Además, está la parte menos visible: el módem. Mantenerse “listo” para recibir mensajes implica negociar con la red, cambiar entre antenas y gestionar picos de señal. Si estás en un sitio con cobertura irregular, el móvil trabaja más para no perder conexión. A eso se le suman WiFi y Bluetooth, que pueden escanear alrededor para mejorar conexiones, ubicación o accesorios.

móvil Samsung con la pantalla pagada

Cómo se traduce en batería, datos y temperatura

La primera consecuencia es la batería. No es un consumo brutal de golpe, pero sí un goteo. Hay noches en las que pierdes un 2 por ciento y otras en las que cae un 10 por ciento sin haber tocado nada. La diferencia suele estar en si el reposo fue real o aparente.

La segunda es el consumo de datos, sobre todo si tienes subidas automáticas de fotos, copias en la nube o apps muy “charlatanas”. No siempre es mucho, pero cuando vas justo de tarifa o estás tirando de datos porque el WiFi falla, se nota.

La tercera es la temperatura. Si el móvil se activa con frecuencia y, encima, alguna app se queda enganchada en segundo plano, puede calentarse más de lo normal incluso con la pantalla apagada. Ese calor extra también penaliza la batería y hace que el sistema limite rendimiento en algunos momentos.

Limitar el trabajo en segundo plano tiene sentido si estás notando drenaje nocturno, si el móvil amanece caliente, si tu tarifa de datos va al límite o si estás en un día largo y necesitas exprimir batería. También ayuda cuando viajas y el móvil está saltando entre antenas, o cuando usas muchas apps con notificaciones constantes.

Eso sí, recortar demasiado tiene peaje: notificaciones menos inmediatas, copias que se retrasan o apps que tardan un poco más al abrir. Lo ideal es cortar lo que no aporta.

Lo mejor es empezar por lo básico: revisa qué apps tienen permiso para ejecutarse en segundo plano y quítaselo a las que no necesiten estar vivas. Limita actividad en segundo plano y datos en segundo plano para apps concretas.

Después mira sincronizaciones y copias: programa o limita subidas de fotos en datos móviles, evita que todo se actualice sin control y deja el ahorro de energía para cuando de verdad lo necesitas. Con dos o tres cambios bien elegidos, tu móvil vuelve a un reposo mucho más real, y se nota en autonomía, estabilidad y hasta en lo “fresco” que se mantiene.

Imágenes | Dall-E con edición

En Xataka Móvil | Un Galaxy ya es un ordenador de bolsillo, pero con este "accesorio" puede ser un portátil de verdad 

En Xataka Móvil | La RAM va a hacer que los móviles suban una  barbaridad. Samsung ya se está preparando para que los Galaxy S26 no  sean más caros

Inicio