Estaré fuera de casa en Navidad: ¿es mejor apagar mi router Wi-Fi o dejarlo encendido?

Estaré fuera de casa en Navidad: ¿es mejor apagar mi router Wi-Fi o dejarlo encendido?

Estas son las ventajas e inconvenientes de desconectar el router y dejar tu casa sin internet al irte de vacaciones

1 comentario Facebook Twitter Flipboard E-mail
Navi

Apenas falta una semana para Navidad, por lo que muchas personas entre las que me incluyo nos desplazaremos de nuestra casa habitual a la residencia familiar, la vuelta al pueblo. Maletas listas, ganas de reencuentros, dejar la caldera en modo away y otros preparativos domésticos antes de la marcha que lanzan una pregunta que seguro se hace mucha gente: ¿dejo el router encendido o lo apago mientras estoy fuera? Spoiler: mejor dejarlo en funcionamiento.

Primera opción: Apagarlo

Hay una lógica aplastante en dejarlo apagado: va a gastar menos electricidad, lo que tendrá cierto impacto en la factura de la luz. Asimismo, si el router no está en funcionamiento, en cierto modo descansa y lo desgastamos menos.

Hablemos de cifras. Dejar el router encendido todo el rato durante 24 horas los 365 días del año supone aproximadamente unos 50 euros anuales: tenerlo dos semanas apagado va a suponer menos de un euro a la semana, una miseria. Vamos, que te estarás ahorrando menos de lo que cuesta un doble en Madrid.

Gradico Consumo en euros del router (Gráfico: Xataka Home)

Por otro lado es conveniente destacar que los routers están diseñados para estar funcionando continuamente, por lo que apagarlo durante dos semanas o incluso por las noches no va a traducirse en un aumento en su rendimiento. Es más, apagar y encender el router a menudo puede resultar hasta problemático por la gestión de los ciclos térmicos.

Los routers están preparados para aguantar un amplio abanico de temperaturas y sus consecuencias, como el estrés mecánico inducido a sus características físicas y eléctricas. Si apagamos, el router pasa de estar en funcionamiento y en caliente y cuando vuelve a encenderse tiempo después, estará totalmente frío, lo que puede provocar cierto desajuste térmico. No es que vayas a romperlo por apagarlo y encenderlo, sino que lo importante es tener claro que están hechos para lidiar con su dura vida siempre encendidos, así que no pasa nada porque esté estas dos semanas operativos. Pero mejor apagarlos solo cuando se den ciertas condiciones.

¿Y si mi vecino me roba el Wi-Fi cuando no estoy? Que haya un Wi-Fi siempre disponible resulta muy goloso para amigos de lo ajeno que quieran conectarse a internet gratis y claramente si lo apagamos, les estamos cerrando las puertas a esa posibilidad. No obstante y si lo que quieres es evitar intrusos en tu red o cosas peores como posibles ataques, es recomendable configurarlo adecuadamente: cambiar la contraseña de acceso al router, modificar el nombre de la red y su clave, hacer un filtrado de dispositivos mediante MAC son algunas de las opciones más importantes.

Segunda y mejor opción: dejarlo encendido

Si tienes domótica en casa, esta es de calle la opción ganadora: robots aspiradores, bombillas y enchufes inteligentes, altavoces smart, cámaras de seguridad... se controlan a través de una aplicación y quizás con órdenes de voz, pero si les quitamos la red Wi-Fi, perdemos el acceso a distancia y en algunos casos pierden su razón de ser.

Lo explico con algunos ejemplos. Una de las cosas que me gusta hacer cuando estoy fuera es mantener la casa moderadamente limpia, así que de vez en cuando pongo el aspirador desde la app. Si no hay Wi-Fi, no habrá forma de hacerlo. Ese aspirador en funcionamiento no solo mantiene mis suelos sin polvo, sino que también hace ruido que puede hacer pensar al vecindario que estoy en casa. Tampoco podría pedirle a Alexa, Google Assistant o a otro asistente de voz que ponga un par de canciones de vez en cuando o encender bombillas desde el móvil.

¿Para qué poner algunas canciones o encender luces? Porque así simulo que estoy en casa. Y es que aunque cierre la puerta a conciencia, una forma de disuadir a los ladrones es que parezca que haya alguien dentro.  Sí, tengo todas las persianas bajadas para intentar aislar la casa del frío, pero en habitaciones como la cocina o el baño no hay y sí que se puede ver luz desde fuera. En mi caso no tengo cámaras de vigilancia conectadas, pero sí un Echo Show con pantalla y cámara que hace las veces y que desconectado no me serviría para nada. Así que que mi casa tenga Wi-Fi en Navidad me sirve para mejorar la seguridad.

Finalmente también me gusta que cuando vuelva en enero mi casa esté a una temperatura agradable. Yo no tengo un termostato inteligente para controlar mi calefacción con el móvil y no es una opción para mí puesto que mi piso es de alquiler, pero sí que dispongo de un calefactor eléctrico conectado que suelo encender un rato antes de llegar para subir la temperatura. Sin Wi-Fi, no podría aprovechar este recurso.

Con todo lo anterior en mente, solo existe un caso en el que podría tener sentido apagar el router en Navidad: que no tengas ni un dispositivo conectado en casa.

Portada | Bing Image Creator

En Xataka Móvil |  Cuándo conviene apagar el router WiFi de casa y por qué no ahorrarás mucho dinero haciéndolo

Inicio