Crecer tenía que crecer porque los volúmenes tanto de ventas como de los propios catálogos de los fabricantes así lo hacían esperar, pero esta vez el aumento del mercado de los móviles se indicará con una sola cifra. Éste y otros datos con respecto al año 2015 vemos en la última predicción de IDC con respecto al último trimestre.
En concreto hablan de un crecimiento del 9,8%, correspondiente a un total de 1.430 millones de unidades distribuidas. Un valor que destaca al quedar por debajo del previsto tanto en la previa previsión de los analistas (que daban un 10,4%) como en las anteriores. Un valor que esperan que crezca en los próximos cuatro años.
Si hacemos un rápido repaso a grosso modo, durante este año hemos visto algunos indicadores que explicarían el hecho de que aún crezca pero lo haga de manera modesta, al menos con respecto a los anteriores aumentos. Compañías como Apple y Huawei han batido récords propios y ésta segunda en particular se encuentra en un ascenso destacable. Pero no podemos decir lo mismo de Xiaomi o una HTC que ha ocupado titulares de mal dato en peor.
La geografía del estancamiento
Según apuntan en IDC, el hecho de que se trate de una cifra menor a la obtenida en la anterior previsión refleja el efecto de que haya habido un crecimiento particularmente lento en las distribuciones por parte de Latinoamérica, Asia (excepto Japón), la región del Pacífico y el oeste de Europa. Sin olvidar a China, de cuyo estancamiento en ventas también llevamos hablando desde hace meses al tratarse de un mercado de peso a nivel global.
Explica Ryan Reth que el que esta tendencia cambie girará entre otras cosas entorno al éxito de los smartphones de bajo coste en los mercados emergentes, factor que ha sido muy importante durante el último año, en cuanto a obtener el rango de precios clave para los compradores del primer smartphone como para los que lo renuevan. Esto tiene una relación directa con la duración de dicho ciclo de renovación de terminales de los usuarios, ya que si los teléfonos tienen el precio más ajustado facilita que éste se reduzca.
Pero, por otro lado, el que un smartphone nos dure más depende en primera instancia de la calidad del mismo, es decir, de los materiales. Según IDC en un tiempo veremos como la duración media del ciclo de renovación (dos años) se reducirá debido sobre todo a que normalmente la calidad de los materiales que componen estos terminales de alrededor de unos 100 euros hace que no lleguen a tal duración.
El futuro de los sistemas operativos
Las miradas se dirigen a Windows Phone cuando se habla del futuro y de que aún haya algo de calma en el crecimiento del mercado. Los de Redmond se hallan en un periodo de renacimiento a varios niveles en su empresa, con cambios importantes a nivel de plantilla y planteamientos en su software que se abren a los otros sistemas, como los proyectos Islandwood y Astoria para que los desarrolladores con productos en iOS y Android los porten al sistema de Microsoft. Pero desde ITC no esperan que esto funcione al menos en los próximos años.
Hacen referencia a la bajada del precio medio de venta de los terminales que deducen de este año 2015, el cual sitúan en 148 dólares, 71 dólares por debajo del que calculan para Android (219 dólares), debida según ellos a una mayor presencia en el sector de bajo coste por parte de la compañía. Algo que ayudó a alcanzar los casi 35 millones de distribuciones en 2014 pero que no habría funcionado para el presente año, para el cual calculan un descenso del 10,2%. Y no sólo eso, sino que pronostican que la tendencia a la baja seguirá en 2016.
Completamente distinto es el panorama que prevén para los sistemas operativos mayoritarios, si bien tampoco se prevén subidas espectaculares en Cupertino y Mountain View. Un 1% crecería Android desde el estimado 81% en 2015 y Apple se mantendría en su 14-15% anual con pequeñas subidas en los lanzamientos de productos.
¿Dónde quedan los terceros en discordia? No hay una previsión detallada para Cyanogen y las plataformas minoritarias que suponen una alternativa a lo común, pero desde IDC no ven que su impacto vaya a ser determinante al menos para Android en los próximos años. No obstante, concretamente Cyanogen es un ejemplo de crecimiento como hemos estado viendo este año, estando presente cada vez en más terminales.
Los brotes verdes de nuevo en África
En las últimas semanas este continente ha sido noticia por ser el lugar de elección para proyectos relacionados con la mejora de las telecomunicaciones así como por hacer llegar ciertos modelos de terminales. Junto con Oriente Medio, estas regiones representan la mejor previsión en cuanto al crecimiento del mercado este año, llegando casi al 50% de diferencia con respecto a 2014 para el mismo periodo, sobrepasando el gran crecimiento que se ha visto en India e Indonesia.
En poco más de un mes comprobaremos si la previsión para este año se ajusta a los resultados del balance con las cifras de distribuciones y ventas de todo el año. En el terreno de juego están unos precios de salida históricamente altos en la alta gama, un boom de nuevos fabricantes optando por el modelo low-cost, el parón de China y la situación económica mundial que junto con la fuerza de las tendencias asentara la dirección de la demanda. Veremos quién ha sabido jugar mejor sus cartas.
Via | IDC
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