Me molesta regalar mis datos de compra, pero odio el papel. Tras dos años con el ticket digital de Mercadona, no dejo de recomendarlo

  • Agradezco que no he tenido que descargar ninguna app ni me ha pedido datos más allá de mi teléfono y mi email

  • He creado una regla en mi correo electrónico para que todos los tickets se guarden automáticamente en una carpeta

Mercadona Ticket Digital
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Noelia Hontoria

Editora

Han pasado ya dos años desde que Mercadona estrenó su ticket digital. Fui una de las ‘early adopters’: no había probado nada similar hasta ese momento y me apetecía ver cómo lo había implementado esta cadena.

Dos años después, tengo claro que tiene todo el sentido del mundo y de hecho incluso me molesta que otros supermercados no me ofrezcan esta opción. Tengo motivos para usarlo más allá de la sostenibilidad.

Por fin he terminado con el lío de papeles en mi bolso… y sin regalar mis datos

El primer motivo por el que prefiero infinitamente el ticket digital al ticket impreso es que no genero más papel que al final acaba arrugado en mi bolso y forzándome a hacer una limpieza cada X semanas, cuando la cosa se me va de las manos.

Un ticket en papel, además de ser poco sostenible, suele terminar arrugado en un bolsillo o o irse inmediatamente a la basura, por lo que es el momento de asumir que han dejado de tener sentido. No tiene ninguna lógica que hayamos eliminado el papel de muchísimos trámites pero sigamos imprimiendo tickets a cascoporro.

La forma en la que lo ha gestionado Mercadona me parece excelente por una razón: no aprovecha esta coyuntura para hacerse con datos personales innecesarios. Otros supermercados, como Día o Carrefour, han implementado también una especie de ticket digital, pero en realidad no tiene nada que ver el ‘modus operandi’ de Roig.

Estos te obligan a ser miembro de su Club, por lo que recopilan y guardan datos personales que no tienen por qué tener. Para que yo pueda tener mi ticket en mi correo electrónico a nadie le debería importar cómo me llamo, dónde vivo o cuál es mi fecha de nacimiento.

El ticket digital de Mercadona únicamente vincula una tarjeta de crédito/débito a un número de WhatsApp y un correo electrónico. No me da de alta en ningún tipo de plataforma de fidelización y en dos años no he recibido ni un solo email de publicidad. Tampoco tengo que tener aplicaciones extras descargadas. Todo limpio y transparente.

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Otra buena ventaja que he descubierto a lo largo de estos años es que puede parecer una tontería, pero ahorro tiempo en la caja del super. El pagar y poder irme automáticamente sin tener que esperar a que se imprima a mí cada día me resulta más cómodo y creo que esos segundos marcan la diferencia en una buena experiencia de compra.

El ticket llega inmediatamente al email y puedo revisar si me han cobrado todo bien igual que con el papel. La verdad que no suelo hacerlo. Lo que sí que he hecho ha sido crear un regla en mi correo electrónico para que todos los tickets se me vayan directamente a una carpeta y así poder tenerlos a mano si en algún momento me hacen falta para devolver algo.

Para mí ya no hay vuelta atrás y ahora solo quiero tickets digitales, pero no de cualquier manera. Me niego a instalarme una app por cada cada de supermercado o a darme de alta en sus clubes de fidelización para vender mis datos a cambio de unos cuantos céntimos de ahorro al final del mes.

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