España es uno de los países con mejor y mayor velocidad de Internet a nivel mundial. Aparte de contar con una gran parte del territorio cubierto con fibra óptica, la velocidad dejó de ser un problema hace años y podemos consumir contenido por streaming sin problemas, incluso videojuegos en la nube o descargar los cientos de GB de algunos títulos actuales de PC, PS5 y Xbox Series X.
Sin embargo, en los hogares no siempre tenemos la configuración óptima. Hay varias formas de mejorar nuestra conexión a Internet en toda la casa y una muy interesante es la que han encontrado nuestros compañeros de Xataka Home: convertir los cables de TV en una red Ethernet para llevar el cable a otras habitaciones en una red local. Es una idea golosa y puede funcionar, pero no es perfecta.
Los pros de usar un adaptador coaxial para multiplicar Ethernet en casa
Lo primero es lo primero: si tienes conexión de TV en tu casa, y cumple los requisitos, vas a poder convertirla en una red de Internet. De este modo, y con un adaptador, puedes conectar dispositivos por cable en aquellas habitaciones en las que tengas el conector de antena de televisión.
Lo más habitual es que en tu salón, cocina y dormitorio tengas este puerto para poder conectar la televisión y nutrirla de la señal de TDT. Los cables utilizados son los de tipo coaxial y, antiguamente, algunas operadoras de telefonía los utilizaban antes de la existencia de la fibra óptica para llevar Internet a algunos hogares.
Ahora, puedes comprar un adaptador coaxial-Ethernet que permite crear una red local sin necesidad de tirar cable por las paredes o sin tener que comprar un PLC. Esta es una solución interesante porque hay veces que la instalación eléctrica no soporta del todo bien los PLC y la ganancia de velocidad frente al WiFi no es demasiado evidente. Si eso ocurre, por cierto, quizá te convendría echar un ojo a la instalación.
Pero bueno, lo que se consigue con este conversor de coaxial a Ethernet es una red local punto a punto: si tienes el router en el salón, uno de los adaptadores debe ir conectado al propio router y al puerto de la televisión. En el puerto de televisión de otra habitación, colocas el otro adaptador y puedes llevar Internet por cable a un dispositivo como una consola o un televisor.
Por lo general, son dispositivos Plug&Play, por lo que los conectas.. y listo, empiezan a funcionar, y la velocidad es destacable. Hay algunos que sobrepasan el gigabit, pero también otros más baratos que no nos darían para jugar en streaming, pero sí para ver Netflix con una calidad óptima en un televisor, por ejemplo.
Las contras
Ahora bien, pese a lo bien que suena todo esto, hay dos grandes inconvenientes. El primero es el precio, ya que los mejores dispositivos para esto se encuentran por unos 230 euros (modelo Comtrend G.hn Powerline 1200 Mbps) o 270 euros (modelo ScreenBeam Moca 2.5).
Ofrecen velocidades altísimas, pero el precio es igualmente elevado. Por otro lado, si conectas esto vas a poder llevar Ethernet a otra habitación, sí, pero te quedarás sin señal de televisión. Si utilizas un Android TV para ver la tele o un dispositivo como un Fire TV, esto no debería afectarte demasiado.
Un tercer inconveniente es que el funcionamiento puede no ser óptimo si el cableado entre los diferentes puertos de la antena no es directo. Si tenemos divisores o cualquier elemento que pueda entorpecer la conexión, no alcanzaremos las mayores velocidades.
Además, puede que donde más te interese llevar conexión por Ethernet sea a un punto muy alejado del router. Y es que, en una distribución de hogar más o menos convencional, las habitaciones con puerto de televisión son las cercanas al salón y es muy posible que ahí es donde esté el router, por lo que este dispositivo no sea tan necesario.
Las alternativas
Está claro que es interesante conocer que este dispositivo existe y puede ofrecer, con las condiciones óptimas, una conexión de calidad en otras habitaciones, pero si me preguntas, por esos 200 euros quizá optaría por otra soluciones si el PLC no te funciona.
No me voy a extender demasiado, pero aquí van:
- Pasar cable a través de las paredes. Sólo necesitas un taladro y un cable kilométrico de buena calidad. Y, bueno, un multiplicador de Ethernet, que no es muy caro. Echando un poco de paciencia para pasar el cable de Ethernet a través de los 'macarrones' que ya tienes en las paredes, con dos o tres agujeros pegados al rodapié puedes llevar Ethernet a la habitación que quieras.
- WiFi Mesh. Las soluciones de WiFi de malla han bajado bastante estos últimos años y es una solución ideal para casi cualquier tipo de hogar. Hay configuraciones de dos o tres multiplicadores que permiten conectarnos con una genial calidad a nuestra red WiFi principal y nuestros dispositivos van cambiando inteligentemente entre el multiplicador para tener siempre la mejor cobertura. Por menos de esos 200 euros de los adaptadores coaxiales, hay muy buenas opciones.
- Un punto intermedio. Si pasas cable por las paredes, en lugar de a un multiplicador de Ethernet, puedes multiplicarlo a un amplificador de WiFi. Me explico: pones el amplificador en un punto alejado del router, llevas cable a través de las paredes hasta donde está el dispositivo y... listo, tienes otro punto WiFi de gran velocidad más un multiplicador de Ethernet, ya que esos amplificadores suelen llevar dos o tres salidas de Ethernet.
Con esas tres opciones, más la vía del PLC si la instalación eléctrica de tu casa es óptima, tienes opciones muy interesantes para llevar Internet por cable a cualquier habitación de la casa. Pero bueno, está claro que el poder utilizar el cable de la TDT para crear una línea local de Ethernet también es interesante y adecuado para ciertos casos.
De hecho, es posible que si tienes un punto de conexión de tu antena de televisión en un punto alejado de la casa en el que el WiFi no llega bien, puedas poner el adaptador coaxial y llevar el cable a un amplificador WiFi. Esa sería una solución muy conveniente.
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