Cuando Samsung anunció su modelo Wave en el Mobile World Congress, lo hizo principalmente para presentar su sistema operativo bada, pero dando mucha importancia a la última tecnología que incorporaba el aparato, como un hardware que funciona a 1GHz, Bluetooth 3.0 o la impresionante pantalla SuperAMOLED de 3.3 pulgadas.
Es una realidad que presentan múltiples virtudes con respecto a las AMOLED convencionales, y más aun con la tecnología LCD. Lo mejor para conocer las virtudes de las nuevas pantallas es que veamos un vídeo de Samsung que nos explica de forma breve y gráfica las principales diferencias:
La principal ventaja la encontramos en que son más finas que las AMOLED originales, ya que están formadas por menos partes, al unir en una misma la capa táctil y la pantalla en sí, sólo el cristal que las protege va aparte del conjunto. Con ello consiguen terminales más delgados con mayor facilidad.
Al tener menos elementos entre la pantalla y nuestra vista, conseguimos que el color sea más real y vivo, el brillo también mejora considerablemente, consiguiendo que el contenido se visualice mejor en exteriores y presente mejores ángulos de visión.
Otras mejoras atribuibles a la tecnología AMOLED en sí es el menor consumo, muy importante en dispositivos portátiles, y un mejor refresco de pantalla. El segundo dispositivo que hemos tenido ocasión de conocer, que hace uso de la tecnologá SuperAMOLED es el Samsung i8520 Beam.
Vía | IntoMobile.
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